Oaxaca.- La dirigencia de la sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), emplazó al gobierno de Gabino Cué, para que libere el pago de unos 5 mil trabajadores de dicho gremio, -que estaban en proceso de regularización al percibir ingresos por honorarios-, y a los que se ha retenido indebidamente su salario.

El dirigente de la gremial Rubén Núñez Ginés, dijo que ha existido cerrazón de parte de las autoridades responsables del área administrativa del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), para cumplir con el compromiso de pago de los docentes.

Consideró injusto que se deje sin pagar su ingreso a educadores que ya cumplieron y están cumpliendo con su “responsabilidad” frente a grupo en alguno de los casos.

Abundó que existía un compromiso firmado con el gobernador Gabino Cué y la propia Secretaría de Gobernación (SEGOB), para realizar un proceso de regularización de los docentes que quedo truncado cuando empezó aplicarse la reforma educativa federal.

OTRA QUEJA POR FALTA DE PAGO

Por otro lado, un grupo de profesores de la Unidad 201 de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), iniciaron un paro de labores y se manifestaron frente a la sede del Palacio de Gobierno, donde despacha el gobernador Gabino Cué para exigir el pago de salarios a la plantilla docente así como la entrega de recursos que debe destinar el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) para la operación de la institución referida.

Luis Rodríguez Velásquez, señaló que existe un retraso desde febrero de 2013, del pago al personal que está frente a grupo y de contrato, que suman un aproximado de 120 personas y cuyo monto total superar los 2.5 millones de pesos.

 Indicó que el recurso que se adeuda a los profesores es de un millón 400 mil pesos y el gasto de operaciones supera el millón 200 mil pesos.

 Acusaron al representante de Formadores de Docentes, Jehú Reyes de la Rosa, de la desatención a su reclamo.

Como medida de presión determinaron estallar un paro de labores de 24 horas, afectando con ello a 2 mil estudiantes de licenciatura y a 50 más de posgrado de dos maestrías: en educación básica y sociolingüística.