Ya que el presidente, no sé si por darles coba a los gringos o para mostrarnos que ve muchas series de televisión gringas, propuso el famoso número del 911; un valioso y valiente, nacionalista y solidario grupo de mexicanos, dicen que, como él se declara: “somos todos Ayotzinapa”, cuando sabemos que es del grupo Atlacomulco, sugieren y exigen que en vez del pinche 911, se ponga o se aplique en la propuesta del decálogo de Peña Nieto que sea; #43. Si lo piensan bien sus “leales y agudos asesores de imagen” es una buena y sana propuesta que nos recordará  43 jóvenes desaparecidos, forzosamente, por las fuerzas del orden, reclaman el auxilio y la solidaridad.
         Me comenta uno de mis pesudos compadres que trató de utilizar la famosa “banca electrónica” y que ha llegado a la conclusión de que “no sé por  qué siempre te motiva para que a los banqueros los mandemos a la chingada por su voracidad, ineptitud y transas a su máxima potencia, así que, queriendo utilizar la banca electrónica por primera vez, se produjo el siguiente diálogo entre el sistema de este servicio y mi pesudo compadre, que no está al corriente de los nuevos métodos y se acostumbró, como todos los de nuestra generación, a ir a la ventanilla y hacer los trámites para obtener dinero o realizar los pagos, pero como los bancos y los banqueros quieren mandar a la chingada a los empleados, usan este tipo de sistemas para que los clientes no puedan reclamarles nada, y cansados, se vayan a la jodida. Así que marcó para ingresar al sistema y este le dijo: “Bienvenido, para ingresar a la banca electrónica ingrese usted su contraseña”, así que de primera intención acordándosedel conejo Buss, ingresó como su contraseña: zanahoria”.
         -Lo sentimos, su contraseña debe contener más de diez caracteres.
         -zanahoriagrandísima.
         Lo sentimos, su contraseña debe contener al menos una cifra.
         -1zanahoriagrandísima.
         -lo sentimos, su contraseña no puede contener acentos.
         50putaszanahoriasgrandes.
         -Lo sentimos, su contraseña debe contener al menos una mayúscula.
         50PUTASzanahoriasgrandes.
         -Lo sentimos, su contraseña no puede contener más de dos mayúsculas consecutivas.
         ¡50Putaszanahoriasgrandesqutevoyameterporelculosinomedasinmediatamenteacceso!
         -Lo sentimos, su contraseña no puede contener signos de exclamación.
         Ahorasiquevoyairdirectamenteabuscarteytevoyameterlas50zanahoriasporelOjete.
         -Lo sentimos, esa contraseña ya está siendo utilizada por otro usuario”.
         Y así como contamos esta realidad bancaria, donde a los que les importaría tenernos cautivos es a los banqueros para seguirnos exprimiendo, ya nos podemos imaginar cuando marquemos el “mexicanísimo” número del 911… sin tener respuestas en momentos de urgencia, los mexicanos, terminaremos mentando madres y mandando a la chingada a los funcionarios y a sus sistemas copiados de los sistemas gringos, que aparentemente funcionan, pero en las series de televisión, no en la realidad. Entendemos que el presidente casado con una actriz de telenovela, puede obtener ideas de las seréis y no hacer caso a las babosadas que le proponen sus asesores y colaboradores, que están pensando más en hacer sus transas y negocios que en dar resultados en su trabajo, porque todos saben que, en estos puestos burocráticos, lo importante, para llegar a viejo es hacerse pendejo… como lo hacen los policías cuando se trata de encontrar a los desaparecidos que son, en este país, más de 22 mil. Así que el presidente debería estar pensando en dejar la concesión del 911 a una de las empresas del multimillonario Carlos Slim que, dicen es el prestanombres de varios políticos y de otros Carlos, tal como lo son, los Roberto Hernández y los Alfredo Harp… a lo mejor así, medio funciona, pero ya vemos que los teléfonos y sus sistemas son un asco y un robo para los mexicanos…