Tlalixtac de Cabrera, Oaxaca. Se estima que en la actualidad un millón de especies en el mundo se encuentra en peligro de extinción derivado de la destrucción del hábitat terrestre y marino, la sobreexplotación de plantas y animales, el cambio climático que genera además la expulsión de patógenos, la contaminación y la presencia de especies exóticas invasoras.

Así lo precisó el abogado ambientalista José Luis Funes Izaguirre, durante la conferencia “La hora de la naturaleza: La biodiversidad en México y el mundo”, dictada en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, organizada y transmitida por la Secretaría del Medio Ambiente, Energías y Desarrollo Sustentable (Semaedeso) a través de su cuenta oficial en Facebook: https://www.facebook.com/SEMAEDESOoficial.

Al respecto, el titular de la Semaedeso, Samuel Gurrión Matías, destacó que dicha conmemoración más que un festejo, debe ser vista como una jornada de reflexión, preocupación y compromiso de los seres humanos para cuidar los ecosistemas y la vida que estos albergan.

¨Con el respaldo del gobernador Alejandro Murat, hemos construido con la participación de la sociedad civil, la Estrategia para la Conservación y Usos Sostenible de la Biodiversidad, y hemos puesto en marcha intensas campañas de reforestación, y manejo de residuos sólidos, con participación de municipios, comunidades, autoridades agrarias y escuelas”, puntualizó Gurrión Matías.

Durante su exposición, José Luis Funes Izaguirre dio a conocer un panorama sobre la situación de la biodiversidad en México y en el mundo -en donde se estima que existen 8 millones de especies- la pérdida de vida silvestre a lo largo del tiempo generada principalmente por la actividad humana, la destrucción de los ecosistemas y el tráfico de la vida silvestre como origen de la pandemia COVID-19.

Precisó que México es considerado un país megadiverso gracias a su ubicación geográfica y condiciones orográficas, que ha permitido entre otros aspectos, un alto grado de endemismo. El país  ocupa el primer lugar en el número de especies de reptiles, segundo lugar en mamíferos, cuarto en anfibios y el quinto en aves que viven o transitan por el territorio. 

Señaló que existen aspectos fundamentales para enfrentar en el futuro próximo la crisis sanitaria generada por el COVID-19, entre las que se debe identificar la interconexión entre la salud de las personas, animales y ecosistemas, fortalecer y aplicar las normas ambientales existentes, además de incentivar actividades más sostenibles y positivas para la naturaleza.

En este sentido, Funes Izaguirre concluyó en que la participación ciudadana en gestión ambiental, particularmente en biodiversidad y vida silvestre es fundamental y se basa en tres pilares: la información clara y oportuna de las instituciones ambientales, así como educativas; la participación efectiva en la toma de decisiones con la opinión de los diversos sectores inmersos; y la justicia ambiental como derecho de todos los seres humanos. 

Cabe destacar que cada 5 de junio, desde 1974, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente como la fecha más importante para fomentar acciones ambientales a nivel global. Este año el lema es “La hora de la naturaleza”,  título que da referencia a conocer la importancia de los vínculos que conectan a todos los seres vivos de la tierra y cómo actuar.