Coahuila.- Este lunes, en conferencia de prensa, se reveló que el niño de 11 años que provocó el tiroteo al interior del colegio Cervantes en Torreón, Coahuila, el pasado viernes, usó dos armas de fuego que le pertenecían a su abuelo.

Así lo dio a conocer el fiscal general de Coahuila, Gerardo  Márquez, quien estableció que luego  de las investigaciones que se han estado realizando por el tiroteo en el colegio Cervantes, se estableció que las armas utilizadas por el alumno agresor eran propiedad del abuelo.

Debido a la implicación, se indicó que se están analizando qué acciones legales se podrían interponer contra el abuelo o los familiares del niño, al dejar a su alcance dichas armas; sin embargo,  esto se determinará  hasta que concluyan las indagatorias.

Apoyo psicológico ya dio inicio

Mientras se define la implicación del abuelo del niño agresor, también se informó que este lunes, 100 maestros del colegio Cervantes ya están recibiendo apoyo psicológico, así lo confirmó el secretario de Salud de Coahuila, Roberto Bernal Gómez.

Además, mencionó que se brindará atención especializada a las víctimas de estos hechos, con la ayuda de Gerardo Cantú Garza, reconocido psiquiatra y coordinador del Equipo de Intervención en Crisis de Nuevo León.

Se da cumplimiento a protocolos internacionales

El funcionario puntualizó que lo anterior es el segundo paso fundamental del protocolo de emergencia como el Código Naranja, con el que se prepara a los hospitales y quirófanos para recibir a los afectados.

Por lo tanto, aseveró que no es algo que estén inventando, son protocolos internacionales y explicó que ya se comunicaron con especialistas estadounidenses, de Minnesota y Texas, además de la Universidad de Salamanca, España.

Es por eso, que desde el pasado fin de semana, se conformaron grupos de trabajo y como primer paso se ofrece apoyo a maestros, luego a los alumnos y después a los padres de familia, con el fin de detectar un posible estrés postraumático, aseguró el secretario.