La Tierra se está acercando hacia un futuro hostil para la vida si la temperatura sigue aumentando. Sólo tenemos 12 años para emprender medidas emergentes.

Nuestro planeta se encamina hacia un aumento de 3 °C en la temperatura, sin embargo es urgente limitarlo a 1.5 °C.

El Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU (IPCC) advirtió que si no se reduce esa cifra presenciaremos la extinción total de los arrecifes de coral y el nivel del mar subiría 10 centímetros con cambios en la acidez de los océanos.

Esto ocurrirá tan sólo si la temperatura pasa de 1.5 °C a 2 °C.

Con esa misma tendencia en los termómetros, las inundaciones crecerían afectando a diez millones de personas más y las áreas de cultivo de arroz, maíz y trigo perderían terreno. Por si fuera poco, seríamos testigos de un océano Ártico sin hielo en el verano.

Debilitar el calentamiento hasta 1.5 °C mitigará la prevalencia de enfermedades como el dengue o la malaria. Además millones de personas quedarían menos expuestas a los riesgos climáticos.

En el Acuerdo de París contra el cambio climático se estableció un máximo de 2 °C. Se pensaba que ese umbral permitiría controlar los cambios en el planeta.

Lo cierto es que el último informe del IPCC demuestra con más de 6 mil referencias científicas que se necesitan esfuerzos para llegar a 1.5 °C y así salvar el futuro de la Tierra. Después de 2030, en sólo 12 años, se rebasará este último número lo que precipitará cambios violentos.

“Mantener el calentamiento global en un nivel inferior a 1.5 grados en vez de 2 será muy difícil, pero no imposible“, destacó el presidente del IPCC, Hoesung Lee, en la presentación del informe.

Los próximos 12 años serán los más importantes en la historia de la humanidad.