El sismo de intensidad 7.5 que sacudió la madrugada de este lunes el centro de Papúa Nueva Guinea deja al menos tres muertos confirmados y temores de un gran desastre conforme se obtenga más información.

Las comunicaciones con las provincias de Southern Higlands y Hela se encuentran suspendidas, pero de acuerdo a los reportes que van llegando, la situación podría empeorar, señalaron reportes de prensa local.

William Bando, administrador de la provincia de Hela aseguró en una comunicación satelital que al menos hay 10 personas fallecidas, pero decenas de construcciones fueron destruidas y por ello se teme la pérdida de más vidas.

Uno de los edificios más dañados parece ser el aeropuerto de Komo, con afectación en la mitad de su superficie, indicó el funcionario al Post Courier.

Por lo pronto, las escuelas en ambas provincias suspendieron sus clases de manera indefinida.

El Servicio Sismológico de Estados Unidos informó que el movimiento ocurrió a las 3:44 horas de este lunes (17:44 GMT del domingo), cerca de la localidad de Porgera, en la provincia de Enga, 633 kilómetros al noroeste de Puerto Moresby.

En tanto, suspendieron sus actividades la mina de cobre Ok Tedi en la adyacente provincia de Occidente debido a serios daños en las carreteras, así como líneas que conducen concentrado de cobre, con temores de escapes tóxicos.

También la petrolera Oil Search informó la suspensión de actividades mientras confirma la integridad de todo su personal.

La misma decisión fue tomada por ExxonMobil Limited en sus instalaciones de gas, señaló por su parte Radio New Zealand.