Tuxtepec, Oaxaca.- La carencia de infraestructura en un proyecto apresurado denominado "Conejos de Tuxtepec" y que a todas luces se estructura con fines "electoreros" para fomentar la imagen del Presidente Municipal a un año de las elecciones del 2018, llevó a Fernando Bautista Dávila a tomar la decisión de reducir los espacios del Centro Especializado de Atención a Víctimas de Violencia (CEAVV) "Margarita Maza de Juárez" y en su lugar otorgó dormitorios a los jóvenes del equipo profesional que competirá en el fútbol de la tercera división.

En el inmueble ubicado a un costado de la unidad deportiva "Benito Juárez" en el bulevar bicentenario del fraccionamiento costa verde, durante 20 días se realizaron trabajos de condicionamiento, únicamente para separar con un muro las áreas donde los hombres practicantes del balompié no podrán juntarse con las mujeres y niñas víctimas de violencia, algunas de ellas separadas de sus familias por casos de maltrato, violación y trata.

Ahí con la anuencia de la Presidenta del DIF Municipal María Luisa Vallejo, esposa del edil Fernando Bautista Dávila, así como de la directora Arlet Cruz Barradas, se introdujeron 2 literas por cada cuarto que sirven de dormitorios y lugar de concentración para los jóvenes que ocuparán un espacio en el equipo "Conejos de Tuxtepec".

Es de conocimiento que actualmente viven 4 jóvenes en el CEAVV, aunque se tiene pensado que el espacio se incremente a más futbolistas foráneos que llegarían como refuerzo del equipo de la tercera división.

La ubicación del Centro Especializado de Atención a Víctimas de Violencia es ideal para el entrenador, puesto que el equipo promovido por el Presidente Municipal, se prepara justo a un costado en la Unidad Deportiva, así que debido a la cercanía con su nuevo hogar en el CEAVV los jóvenes son vigilados para que no se des concentren de sus prácticas diarias, es decir que no salgan de antro y no introduzcan bebidas alcohólicas, pues además la dirección que depende del DIF Municipal cuenta con un policía municipal que vigila la entrada del personal y de los ocupantes del inmueble.

No obstante se hace mención de que en el nivel profesional los equipos están obligados a contar con su propia "casa-club" que sirva como espacio único de convivencia entre los jugadores, en este caso de fútbol, sin embargo en este caso se deja en estado de indefensión al sector más vulnerable, más aún en un lugar que se promueve como óptimo para fomentar la integración y recuperación de menores de edad víctimas de violencia.