Oaxaca.- El arzobispo de la diócesis de Antequera-Oaxaca, José Luis Chávez Botello, enfatizó que los gobiernos federal, estatal y los representantes del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca, IEEPO, no deben de dar ni un paso atrás en el tema de la nueva ley educativa para Oaxaca, una vez que fue aprobada por los diputados locales, integrantes de la sexagésima segunda legislatura de esta entidad.

“… No debe de existir ninguna marcha atrás en la Reforma Educativa, al contrario, mejorarla todavía en la práctica, les toca ese trabajo a las autoridades estatales de educación y creo que a toda la sociedad oaxaqueña, si esto facilita la enseñanza y es un paso importante, habría que ir pensando en los siguientes incentivos”.

Consideró que todos los maestros que trabajan en el estado de Oaxaca son servidores y deben de acatar la nueva ley educativa, que ya se armonizó con la ley federal de educación, además son los padres de familia los que tienen que impulsar, cuidar y proponer nuevas ideas para que la ley educativa de la entidad beneficie a las alumnas y alumnos.

Mencionó que la aprobación de la nueva ley educativa para Oaxaca, es un paso más para integrarse a la ley federal de educación y para el beneficio de las generaciones futuras.

Sobre el arranque de las campañas políticas de los diferentes candidatos a contender por la administración pública del estado de Oaxaca, el arzobispo José Luis Chávez Botello, apuntó que esos personajes políticos deben de hacer consciencia de la responsabilidad que tienen ante el pueblo.

Agregó que el inició de las campañas políticas en Oaxaca, se asemejan a los partidos de futbol, en principio se ven, se sienten, quién no juega limpio, quién juega bien, quién busca todo, no hay que alterarse en el inicio, se debe de poner el corazón por adelante.

Dijo que el papa Francisco recientemente hizo un llamado a la integración de la familia, en su visita a México refirió que prefiere una familia herida que intenta todos los días conjugar el amor, a una familia y sociedad enferma.

Manifestó que es preferible una familia que elige volver a empezar una y otra vez su camino, a una familia y sociedad narcisista y obsesionada por el lujo y el confort, es mejor una familia con rostro cansado, pero con entrega a una familia con rostro fatigado, que no ha sabido de la ternura y compasión, reiteró que todos los mexicanos debemos de cuidar a nuestras familias, ya que son la base de nuestra sociedad.