San Raymundo, Jalpan, Oaxaca.– El legislador del V Distrito Electoral de Santo Domingo Tehuantepec, Gerardo García Henestroza sometió a consideración del Congreso del Estado la proposición con Punto de Acuerdo por el que la LXII Legislatura exhorta al Titular del Poder Ejecutivo del Estado para que a través de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Pesca y Acuacultura proceda a crear el Sistema de Alerta Fitosanitaria de Oaxaca.

En su exposición de motivos el diputado señaló que el Sistema de Alerta Fitosanitaria (SAF) proporciona información actualizada sobre situaciones de plagas o enfermedades, así como las mejores opciones para tratarlas, cómo evitarlas y demás información útil para el agricultor.

García Henestroza indicó que el propósito de este sistema en el Estado será el de facilitar la toma de conciencia sobre las plagas exóticas, su detección, prevención y manejo, ya que el SAF proporciona la información de dos formas de notificaciones: oficiales de plagas y Alertas no oficiales.

El legislador Gerardo Henestroza dijo que Oaxaca no cuenta con este sistema, por lo que es necesaria su creación para evitar casos como el que actualmente ocurre con los productores de sorgo en la región del istmo, quienes ven dañados sus cultivos e inversión por la plaga del pulgón amarillo.

Subrayó que el SAF funcionará como un instrumento para evaluar el impacto de las principales plagas y enfermedades de los cultivos de mayor importancia en el Estado, predecirá su comportamiento y generará recomendaciones para el manejo de estos organismos, buscando la complementariedad de los esfuerzos entre las instituciones participantes.

El también presidente de la Comisión Permanente de Administración de Justicia subrayó que los problemas fitosanitarios en Oaxaca –como en cualquier parte de nuestro país o del mundo– obliga a planificar no solamente acciones de prevención y control al nivel de predio o parcela, sino al manejo de estrategias de prevención y contingencia al nivel regional, estatal y nacional.

Finalmente dijo que este tipo de estrategias, deben basarse en un adecuado conocimiento del ambiente físico (clima y suelo), de la dinámica poblacional de los enemigos biológicos y de los factores que determinan la susceptibilidad de las especies cultivadas.