Oaxaca.- El Curso Práctico de Motociclismo cumplió con las expectativas esperadas durante el fin de semana en la calle de Alianza, a un costado de los campos “A” y “B” de beisbol. Desde las 10 de la mañana decenas de personas asistieron para perderle el miedo al vehículo y aprender a manejarlo de una manera correcta.

Aunque la lluvia del domingo impidió por la tarde la llegada de más gente, el domingo las clases se incrementaron y fueron varios los que llegaron, incluso, con sus propias motocicletas, para recibir el adiestramiento correcto del cuerpo de instructores oficiales de Italika México.

Emilio Velásquez Rivera, coordinador de la actividad en la ciudad, dijo sentirse satisfecho con lo logrado y deseó una mayor concientización sobre quienes se transportan en este vehículo, aunque destacó que está comprobado mediante varios estudios y sondeos que el uso de este vehículo reduce gastos, es decir, una persona que durante la semana ocupa el transporte urbano, gasta más en él que en la semanalidad de la moto.

“La finalidad fue fomentar el uso de la motocicleta como un medio de transporte económico y de fácil movilidad”, señaló más tarde al precisar que la venta de motocicletas en la entidad ha tenido un ligero aumento, sin embargo, añadió, hay miedo aún entre la mayor parte de la población, por lo que recomendó hacer un uso correcto del vehículo y recibir la instrucción adecuada.

La capacitación del fin de semana fue teórico-práctica y a los asistentes se les indicó las partes más importante de una motocicleta, así como el arranque, frenado, manejo a la defensiva, por donde y como se debe circular en una vía lenta y en una vía rápida.

Asimismo se dio la instrucción a personas de 16 años en adelante, pues es la edad en la que constitucionalmente pueden emitir una licencia de manejo de motociclista en el país.

El curso fue impartido por el staff de Italika México, integrado por cinco instructores profesionales, quienes ofrecieron las sesiones con cinco motonetas, guantes y cascos para los y las asistentes. Las clases fueron personalizadas y estuvieron dirigidas tanto a quienes nunca se han subido a una motocicleta, como a quienes ya tienen un tiempo conduciendo.