Unos 31 mil millones de dólares de origen desconocido salieron de México en los primeros dos años de gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, cantidad 16 veces superior a las divisas enviadas fuera del país por conductos clandestinos durante el primer bienio del sexenio anterior, la cual fue de mil 823 millones de dólares.

Puestos al descubierto por el Banco de México a través del renglón de errores y omisiones de la balanza de pagos, los envíos al exterior de divisas de negocios ilícitos practicados en el país alcanzaron sus mayores volúmenes a partir del primer trimestre de 2012, pero el punto más elevado se alcanzó en el tercer trimestre del último año de gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, cuando en julio, agosto y septiembre se detectó la salida de 13 mil 231.8 millones de dólares.

Muy cerca de esta marca trimestral quedó la registrada en la balanza de pagos correspondiente al cuarto trimestre de 2014, donde se descubrió el envío al exterior de 9 mil 520 millones de dólares de origen oscuro, durante octubre, noviembre y diciembre del año pasado.

De acuerdo con una nota del periódico La Jornada, el renglón de errores y omisiones engloba los ingresos y salidas de divisas que no fueron registrados por los canales lícitos del intercambio comercial y financiero del país con el exterior por lo que, contablemente, constituye un renglón de ajuste de la balanza de pagos.

Pero también sirve para dimensionar las transacciones y prácticas de los negocios criminales en sus relaciones internacionales, tales como el narcotráfico, el contrabando de mercancías, el lavado de dinero y la trata de personas, entre otros.

Según las cifras presentadas por el Banco de México, en siete de los últimos ocho años el rubro de errores y omisiones de la balanza de pagos ha marcado el envío neto de 88 mil 103 millones de dólares al exterior, cuyo origen no pudo ser encuadrado en los conceptos legales de este instrumento, tales como los gastos de los residentes en México que visitan otros países, el pago de intereses de las deudas de empresas y gobierno, la inversión directa de mexicanos en el exterior, entre muchos otros.

Sólo en 2007 se observó el ingreso de 3 mil 416 millones de dólares en este renglón. De 2008 a 2014 todo ha sido salida de capitales oscuros, pero lavados.

Durante el sexenio anterior, de 2007 a 2012, se pudo detectar el envío de unos 57 mil 255 millones de dólares al exterior a través de los errores y omisiones de la balanza de pagos mexicana; mientras en el primer bienio del actual gobierno la salida ha sido de alrededor de 30 mil 849 millones de dólares, de los que sólo se sabe que aquí estaban pero ya se fueron; es decir, 54 por ciento del total enviado fuera del país por conductos clandestinos en los seis años anteriores.

El año en que el rubro de errores y omisiones detectó la mayor salida de divisas fue 2010, con 22 mil 900 millones de dólares; le siguió 2012, con 18 mil millones, y en el tercer sitio se colocó el resultado de 2013 con envíos fuera del país por 17 mil 600 millones de dólares de origen incierto.

En 2014 ese renglón detectó el retiro de 13 mil millones de dólares, cantidad 71 por ciento mayor a los 7 mil 610 millones que implicó la salida de divisas como inversión de mexicanos en el exterior durante ese año.

En lo oscurito realiza gobierno donaciones millonarias

En las donaciones de los gobiernos impera la opacidad.

Tan sólo en 2014, la Administración Pública federal, los estados, las empresas paraestatales y el Congreso donaron mil 721 millones 779 mil 912 pesos.

Con ellos se benefició a más de 100 fundaciones, asociaciones y organismos civiles, según se informa en otra nota del diario Reforma.

Algunos muy conocidos, como la Fundación UNAM, el Teletón y Fundación Azteca, y otros poco difundidos, como Cauce Ciudadano, Pronatura Noroeste, Fundación de Empresarios por la Educación Básica y Mídete.

Incluso varios municipios reciben estos apoyos.

La falta de transparencia y criterios claros de asignación despierta dudas sobre el uso de estos recursos.

"Son miles de millones de pesos que hay que transparentar porque nos estamos enfrentando a la vergüenza cotidiana de ver una realidad diagnosticada de falta de transparencia y que la clase política nos da evidencias de ello.

"La donación puede ir a organizaciones serias o puede ser la asociación civil de la esposa de algún político. Eso es lo que debemos saber", dijo Juan Pardinas, director del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).

El Senado por ejemplo realizó donaciones por 219 mil 325 pesos, de los cuales 163 mil fueron para el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y 56 mil 325 pesos a Fundación Teletón.

Además de Teletón, los donativos del Gobierno beneficiaron en dos ocasiones a la Asociación Azteca Amigos de la Cultura y las Artes, A.C., propiedad de TV Azteca, con 95 y 45 millones de pesos, respectivamente.

Fundación TV Azteca AC recibió 5 millones 600 mil de Semarnat para apoyar la campaña "Limpiemos Nuestro México".

Incluso varios municipios reciben estos apoyos, para construir parques y espacios recreativos.

La Comisión Federal de Electricidad también fue muy generosa el año pasado con 207 millones 559 mil 961 pesos donados principalmente a municipios.

Pemex fue el más generoso en 2014, con 250 millones de pesos donados para distintos fines.

Algunos organismos, como la Fundación UNAM, recibieron 10 millones de pesos para apoyar el Programa Nacional de Becas y Financiamiento Pronabes-UNAM.

En los últimos cinco años, las dependencias, organismos, empresas y poderes federales han donado más de 8 mil 597 millones de pesos, según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

En 2013, los donativos otorgados superaron los mil 691 millones de pesos, en tanto que un año atrás la cifra rebasó los 2 mil 475 millones.

Cada trimestre, la SHCP publica la lista de beneficiados por los donativos, pero no se presentan detalles del impacto de los recursos entregados.

En el caso de los Gobiernos estatales, sólo 12 de ellos informan del dinero que entregan en donación.

Las donaciones de la Administración Pública son permitidas por la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria en su artículo 80, que señala que los ejecutores del gasto podrán realizarlas siempre y cuando cumplan con algunas condiciones.

Sin embargo, Lorena Cortés, directora de investigación del Centro Mexicano para la Filantropía, comentó que mientras que las transferencias federales a organizaciones de la sociedad civil son transparentes y con reglas claras, los donativos no lo son.

Explicó que los recursos que se otorgan como transferencias suelen ser más cuantiosos que los donativos, pero se compite por ellos a través de convocatorias y presentación de proyectos.

Por el lado de los donativos, fuera del informe de Hacienda, no existe mayor detalle sobre los recursos ejercidos.

"Las transferencias, apoyos y estímulos están etiquetados en el presupuesto, en cambio estos donativos no están sujetos necesariamente a reglas de operación", dijo.