~~Jaime Méndez
Agencia JM:

Leo con sorpresa tu columna del pasado lunes en donde mencionas a mi persona y haces referencia a una traición que según tú, cometió en mí contra el presidente municipal Javier Villacaña, a quien te agradezco califiques como amigo mío.

Y te digo con sorpresa, porque tú y yo en más de una ocasión hemos hablado acerca de la elección de agentes municipales y en todo momento te he dejado clara mi postura de respeto a dicho proceso. Jamás te he mencionado que yo me haya sentido traicionado o desplazado, y mucho menos te di autorización para que usaras mi nombre en los actos de venganza y chantaje a los que estas acostumbrado.

Incluso en tu columna te tomaste la molestia de hacer mención de una anécdota que ocurrió hace algunos años en el Congreso del Estado, sin embargo, olvidaste mencionar que en esa época tu andabas merodeando las oficinas de los diputados buscando “apoyos”, y mira que reconozco que tienes una gran habilidad para conseguirlos, pues en más de una ocasión compartiste conmigo tus métodos para lograr aflojar la cartera de políticos y funcionarios.

Lamento mucho que la relación cordial que he tenido y tengo con el ahora presidente municipal te incomode, pero lamento más que tengas tan poca memoria y no recuerdes aquellos años en que mendigaste ayuda y fuiste escuchado.

Es posible que esa falta de memoria haya generado tus comentarios, por eso estoy dispuesto a reiterarte mi postura y por escrito: Para mí, Javier Villacaña es el mejor presidente que hemos tenido en muchos años, en lo personal y a nombre de mi asociación “Emiliano Zapata” te aclaro que yo si sé agradecer el respaldo que hemos recibido de él, tanto cuando ha estado al frente de cargos públicos, como desde la sociedad civil.

Y si dices que soy su “caballito de batalla y su mastín de luchas” es porque tú me conociste  apoyando el trabajo que ha hecho en las colonias, haciendo tequio, gestionando programas sociales y ahí si reconozco que no soy un luchador débil.

Me hubiera gustado que tuvieras el valor civil de poner tu nombre en tus supuestos textos periodísticos, pero bien dicen que “chango viejo, no aprende maroma nueva”.

Espero Jaime que recapacites tus opiniones antes de escribirlas, no te pido que cambies de actitud porque sé que es imposible, pero si te invito a que hagas mejor uso de tu espacio y tu tiempo. Deja de usar tu medio para atacar e insultar a quien por conveniencia económica antes considerabas tu amigo. Deja de exhibirte como un malagradecido. Deja de utilizar a otras personas para exhibir tus frustraciones.

Te recuerdo que los tiempos del chantaje y el parasitismo ya pasaron. No te cierres las puertas que, conociéndote, seguramente vas a tocar después. Reflexiona.

Tu amigo y servidor

Raymundo Cirilo Hernández