China instó a Estados Unidos a que el presidente Barack Obama abandonara su planes para reunirse con el Dalai Lama, advirtiendo que la cita "dañaría seriamente" los lazos entre ambos países.

"El arreglo de Estados Unidos para que su líder se reúna con el Dalai sería una interferencia grosera en los asuntos internos de China y es una grave violación de las normas de las relaciones internacionales", dijo la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Hua Chunying, en un comunicado.

El Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca dijo que Obama se reuniría en la Casa Blanca con el exiliado líder espiritual tibetano, en una demostración de preocupación por las prácticas de derechos humanos en China.

Pekín califica al Dalai Lama, ganador del Premio Nobel de la Paz, como un "lobo con piel de cordero" que trata de utilizar métodos violentos para establecer un Tíbet independiente.

El líder, que huyó a la India después de un levantamiento fallido en 1959, dice que sólo quiere una verdadera autonomía para el Tíbet y niega que haga una apología de la violencia.