El ruido excesivo, sonidos provocados por industrias, construcciones, aviones, autos, gritos y música a todo volumen son ni más ni menos que contaminación auditiva, dicen 71 de cada cien mexicanos, revela una encuesta de Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE).

29 de cada centenar de los 600 consultados telefónicamente por GCE por todo el territorio de México sobre el tema indicaron que no sabían que los estruendos eran parte de la contaminación ambiental, concretamente la auditiva.

Más de la mitad de la sociedad, 50.2%, menciona que la contaminación auditiva afecta más, mientras que 28.6% señala que la más perjudicial es la visual, 19% no las cree malas por igual a ambas.

Para 43.7% de los entrevistados el estruendo es una problema para quienes se encuentran en las cercanía de sus epicentro, 36.5% indica que repercute en el medio ambiente y 17.1% que ambos.

Otro tipo de contaminación en que poco se piensa es el visual.

Gabinete (www.gabinete.mx) pidió a los encuestadores que respondieron a esta interrogante ¿usted pensaría que el exceso de publicidad podría considerarse como contaminación?: 77.8% respondió que sí tenia en mente que se trataba de un problema, pero 20% no creía que se tratara de una fuente contaminante.

Con estos elementos como telón de fondo, GCE pidió a la gente que recordará si cuando sale de sus casa por razones de trabajo, estudio o diversión regresa con cierto estado de ánimo:

Alrededor de dos terceras partes de los mexicanos (63.8%) vuelve al hogar irritado y cansado; en contraste, el tercio restante (32.8%) asegura que a su regreso se siente relajado y  tranquilo.

Al final de cuentas la gente siente que la contaminación visual y auditiva impacta negativamente en el bienestar de una y otra forma:

29.4% de los mexicanos no duda en que esta forma de contaminación aumenta el estrés, 14.9% piensa que le provoca problemas auditivos y visuales, 9.6% teme que le provoque enfermedades, 6.1% sufre por estas causas dolores de cabeza y 5.6% lamenta que afecte al medio ambiente.

5% dice que los anuncios y ruidos arruinan la imagen de la ciudad y el entorno ambiental, 4.8% sostiene que altera el estado de ánimo y la concentración personal, 4.3% (insiste) en que afecta la salud, 3.1% dice que ruido y publicidad son molestos, 1.4% alerta porque provocan accidentes.

 Extrañamente 2.6% siente que no le afecta en nada el ruido y la publicidad, pero curiosamente 9.7% no sabe si le causa bien o mal, en tanto que 2.2% se perdió en el ruido y la propaganda y no respondió.

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