~~Oaxaca.- El sector hotelero de Oaxaca reconoció que el último fin de semana largo del año,- conocido como el puente de la Revolución- previo a la temporada decembrina, generó oxigeno y respiro al sector turístico, al registrarse ocupaciones hoteleras por encima del 85 por ciento en la capital oaxaqueña.

El presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Oaxaca (AMHYM), Juan Carlos Rivera, aceptó que el año ha sido “difícil” para el sector hotelero, derivado de las diferentes protestas callejeras, por un lado las manifestación y el plantón que mantiene la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en el centro histórico y después las protestas callejeras que generado el caso Ayotzinapa, sin embargo la situación empieza a mostrar mejoría.

Confió que las cifras empezarán a repuntar desde el mes de noviembre, durante el puente de muertos que se generó tan solo en la ciudad una ocupación hotelera promedio por encima del 75 por ciento y ahora este fin de semana largo, del puente de noviembre fue del 85 por ciento, esperando que en diciembre la expectativa llega al 98 y 99 por ciento.

Incluso aceptó ya tenemos confirmadas un 60 por ciento de reservaciones en nuestros hoteles para la temporada de fin de año que van del 23 de diciembre al 31 de diciembre y 6 de enero.

¿Cuáles son las pérdidas que ha sufrido el sector hotelero de junio a la fecha derivado del plantón magisterial en el centro histórico?
-“Estamos perdiendo por concepto de turismo, alrededor de un millón 700 mil pesos en días negros, es decir cuando hay bloqueo de carreteras, cuando nos cierran la ciudad y hay tomas de negocios y manifestaciones callejeras violentas.

“Es decir cada día que hay conflicto de los fuertes perdemos un millón 700 mil pesos en esta ciudad”.

¿Cuántos días negros calcula usted ha ocurrido?
-“No más de 20, sin embargo habría que  hacer un cálculo de las pérdidas que han generado al sector turismo, los 114 días que lleva el plantón de la CNTE en el centro histórico que solo al sector hotelero lo llevó a registrar ocupaciones de menos del 11 por ciento, y esta cifra pone en una difícil situación a los hoteles, que para que puedan salir a tablas con el pago de salarios y sus impuestos requiere de una ocupación del 30 por ciento cuando menos”.