~~Oaxaca.- En Oaxaca, organizaciones y sociedades protectoras de animales, amagaron con realizar protestas callejeras para demandar a los diputados locales, se legisle para prohibir desde la instalación de circos y zoológicos, así como impedir la celebración de rodeos, corridas de toros,  jaripeos y peleas de gallos.

De la misma, manera urgen se incluya en el código penal local castigos graves a quienes maltraten o torturen animales.

Encabezados la representante de la sociedad Protectora Animal Arlet Cuevas, los inconformes piden que haya una amplia consulta pública de la ley de protección animal del estado, que debe adecuarse al resto de las legislaciones locales que se aprobaron en otras entidades, como el propio Estado de México, Veracruz y Colima.

“Considero necesario avanzar un adecuado marco jurídico y legal para controlar, regular, y legislar para sancionar el maltrato animal y control la sobrepoblación canina y generar una cultura de protección de las especies.
“Que incluya la cancelación de permisos para espectáculos con animales como son la instalación de circos, ferias o zoológicos, y se limite además la celebración de palenques, jaripeos, peleas de gallos, corrida de toros y ferias, además de suprimir los permisos de cacería deportiva.

“Nosotros llevamos 15 años luchando y remando contra corriente, ha llegado el momento de marcar un alto a la violencia contra los animales”, afirmó

Consideró que de lograr la promulgación de la ley, debe haber el compromiso de las instituciones para generar una difusión de una cultura de protección de los animales, advirtiendo que hay una conducta antisocial y generalizada en contra de los animales.

Sostiene que las quejas por abusos contra de animales son diarias, desde las que se cometen por parte de instituciones, el sector privado y hasta las que son solapadas por los usos y costumbres y tradiciones de los pueblos indígenas del interior del estado.

“Hay quejas por golpes, mutilaciones y asesinatos en contra de animales, otras también por agresiones física, como torturas, por encierro y lo más grave sin alimentación.

Denunció que en diferentes perreras y antirrábicos municipales se caza a los perros y gatos y se les electrocuta, mientras que a los animales de carga (caballos, mulas y bueyes) se les extralimita carga.

Denuncio que los casos de mayor queja son los municipios de Xoxocotlán, San Antonio de la Cal, San Agustín de las Juntas, Tlacolula, Santa Lucia del camino, San Jacinto Amilpas, San Bartolo Coyotepec, San Pablo Etla, y Teotitlan del Valle, ha llegado a reportarse casos de envenenamiento de animales o el sacrificio brutal y cruel de los perros callejeros de color negro por rituales satánicos.

Otras denuncias son las actividades de caza permitida en contra de animales en peligro de extinción, o la compra de las mismas especies de forma clandestina.

“Hay leones, changos, papagayos y hasta serpientes en las mansiones de gente de poder económico en Oaxaca”, denunció.
SANCIONES Y CASTIGO

Los integrantes de las sociedades protectoras de animales, urgen que se tipifique en el código penal castigos severos de hasta 40 años a quien asesine o maltrate a tortura a los animales

“Si las personas no cumplen con la relación armónica con los animales deber ser multados y sancionados con cárcel de ser posible”.

CASOS DE ZOOFILIA

En tanto Carlos Alberto Morales Martínez, representante de la Fundación “Colmillo Blanco”, denunció la existencia de casos de zoofilia, donde se abusa sexualmente en contra de los animales domésticos y de granja.

Dijo tener denuncias donde incluso intervienen menores de edad y adolescentes en las violaciones de perros, caballos y vacas.

“Las denuncias nos han llegado de los propios veterinarios que han llegado atender animales que abandonan en la calle con el ano por fuera y se llega a detectar en su interior semen humano”

Se denunció el caso, peor la Procuraduría de Justicia se negó actuar por que el implicado era un menor de edad.

Otro caso más se descubrió con otra perra que fue violada por un sujeto que tenía VIH-Sida”.

Abundó que la mayor parte de estos casos se han documentado en la zona metropolitana de la Ciudad de Oaxaca.