La Secretaría de Gobernación acaba de nombrar como “comisionado” o delegado al Estado de Oaxaca, para atender los conflictos que genera la inconformidad magisterial, a Juan Molina Arévalo, quien se desempeñaba como delegado de la secretaría en Puebla.

         El próximo martes, encabezará una mesa de diálogo entre la Comisión Política de la Sección 22 y el gobierno del Estado, donde se deberá atender las negociaciones en torno a la Ley de educación estatal y la disputa entre la Sección 22 y la Sección 59 del SNTE, el problema de los normalistas y sus plazas automáticas y el plantilleo de maestros en las ocho regiones de la entidad.

         Por supuesto que esto parece sencillo y simple, la realidad es que las condiciones de violencia y marginación en la entidad, la inseguridad pública y la represión que se ha desatado por parte de la policía estatal y las presiones de la llamada “iniciativa privada”, que busca posesionarse para lanzar a uno de su cuadros a la gubernatura y desatar la guerra política electoral, podrá genera, como lo vaticinan muchas organizaciones políticas que se han fortalecido a lo largo de los muchos años de marginación y represión en la entidad, de desatar una guerra “revolucionaria” como lo bien manejando el Comité Central del Partido Comunista de México, Gustavo Adolfo López quien señalan que se celebrará en Oaxaca los días 13, 14 y 15 de Septiembra el quinto congreso nacional, bajo la consigna: “La Revolución socialista, tarea inmediata de la clase obrera”· recordando, como lo explica Jaime Guerrero, en su artículo del 21 de agosto que: Ahí recordó que en el 2006 Oaxaca vivió la primera gran revuelta social y en este 2014, aún priva una serie de condiciones políticas que hacen prever que uno de los grandes estallidos sociales comenzará en la entidad y será la vía armada por medio de la creación de guerrillas como se podrá cambiar la realidad social de Oaxaca y el país”.

         Y bueno, de buenas intenciones está empedrado el camino a los Infiernos y tal parece que las posturas encontradas de la clase gobernante encabezadas por los dirigentes del Consejo Coordinador Empresarial y los grupos radicalizados de izquierda, podrán llegar a la confrontación violenta desatando en la entidad una enorme represión  que tendrá como misión eliminar a los grupos y dirigentes sociales y reprimir, sin duda alguna, a los grupos que controlan hasta el momento a la Sección 22 del magisterio.

         Como en cualquier revuelta destinada a imponerse en el poder, sobre todo cuando se inicia desde la derecha como se observa en Oaxaca y con la confrontación de algunos grupos radicalizados de la entidad que tienen ligas nacionales con movimientos armados o grupos de confrontación, los únicos que sufrirán por ello serán los marginados, la gente del pueblo que no tiene nada que ver en esa confrontación violenta que se generará como una especie de “guerra controlada”, para hacer que afloren las “cabezas de la resistencia civil o de la dirigencia social en toda la entidad”. Esto es lo que se ha venido realizando en muchas partes del mundo y es la estrategia generada por los grupos en el poder. Ellos mismos provocan la confrontación para que la gente salga de sus “cuevas” y se genere la violencia y ahí se tiene el pretexto para la represión y la eliminación de los grupos y dirigentes sociales, esto es lo que se vino haciendo en Michoacán o Guerrero y aparentemente, muchos grupos “radicalizados” alientan la violencia y la confrontación y es así como se provoca la gran represión. Si los maestros radicalizados de la sección 22 no lo quieren ver o los muchos dirigentes de la APPO no lo consideran en la confrontación, se generará una enorme represión que solamente afectara a las gentes del pueblo y no a los verdaderos responsables de la violencia, la explotación y la miseria.

         Si no entienden los mensajes y las señales que se envían desde el gobierno federal, estamos mal. La realidad es que el día viernes se conforma la sección operativa de la represión, no de la seguridad, en el grupo de la llamada “DIVISIÒN DE LA GENDARMERÌA”, donde uno de los invitados especiales y destacados fue el gobernador Gabino Cuè al que, sin duda alguna, le brindarán todo el apoyo, sobre todo ahora que hay una gran liga con los grupos de la iniciativa privada que lograrán eliminar a las fuerzas de la “izquierda domesticada” que, en alianza con Gabino, lo llevarán al poder.

         Sin duda, en Oaxaca, se desatará una gran violencia donde los perdedores serán, como siempre, las gentes del pueblo, sobre todo porque la experiencia señala que, en Oaxaca, todo se arregla por medio de la negociación económica y el reparto de PUESTOS Y PRESUPUESTOS, porque los grupos y dirigentes, tienen un precio y están en remate…