¡Que conste,...son reflexiones!

  • Sócrates A. Campos Lemus

        Es curioso lo que podemos concluir de un proceso electoral. Desde hace algunos años hemos visto que todos los procesos se han basado en la fuerza avasallante de los medios de comunicación, era tal el poder que se puede decir que, muchos, sostuvimos de que: LA POLÍTICA YA NO SE HACÍA EN LOS PARTIDOS SINO EN LOS MEDIOS. Hoy, las condiciones en varias entidades, sobre todo como en Oaxaca, donde se había demostrado que “los políticos en venta son baratos”, también se demostró que, en política, difícilmente existían lealtades y que las enemistades eran permanentes, pero los intereses lograban en algunos casos maravillas en las “reconciliaciones”, por esa razón, Oaxaca, después del hundimiento del proceso electoral cuando pierden el poder los priístas, los grupos del mismo partido demostraron lo que eran los intereses, los brincos de un lado al otro, la sensación de estar sin guías ni saber qué hacer, la orfandad, pero además, las corruptelas de grupo y las morales afloraron de tal suerte que, el famoso PR,I era un grupito de políticos reciclados o bien de políticos ineficientes, corruptos, cínicos, perversos y en el mejor de los casos, con importantes intereses en la vendimia de sus “caricias y preferencias”, dedicados al chantaje político y sin conciencia de grupo,  menos de partido. Lo demostraron muchas veces a lo largo de muchos procesos de tal suerte que en vez de avanzar, como los cangrejos, caminaban para atrás, sobre todo, cuando los viejitos del sistema se colocaron y las viejas oportunistas fueron alzadas a los niveles de dirección política porque contaban en sus filas con los niños golpeadores y porriles. Así que las cosas en Oaxaca estaban mal, muy mal, no solamente para el PRI, el desmoronamiento del PRD, del PT, del PAN, las luchas internas dieron paso a que Morena pretendiera ser una solución al desgaste, pero hay que reconocer que Andrés Manuel López Obrador seleccionó más a los políticos corruptos, ineficientes, oportunistas, chapulineros y ratas para los puestos de elección popular, en vez de llamar a las bases a definir a sus candidatos y por esa razón perdió la gran oportunidad en Oaxaca, su bastión más importante.
         Cuando llega como Delegado del Partido un político con experiencia y capacidad, con valor y relaciones, sabe que lo primero que debería de hacer es integrarse con las bases y dejar a las “dirigencias” en su lugar y comodidad, no se les fueran a romper las almorranas o les dieran los infartos, así que comenzó a hilar fino y logró lo que pocos han logrado en las condiciones adversas, recuperar la fuerza del PRI y lograr siete diputados federales en condiciones de desventaja total ya que, los recursos, no fluyeron, porque sabemos, los viejos dirigentes, normalmente, se los embolsan y se los gastan en las pendejadas de la “casa”, pero, curiosamente, este operador político también influye en los procesos de Campeche, Chiapas, D.F. y en Veracruz muestra el músculo de sus cuadros en los principales municipios con el viejo lema de: FIDELIDAD. SE PODRÍA DECIR QUE ES TODA UNA CORRIENTE POLÍTICA DENTRO DEL PARTIDO, ENTENDIÓ, Fidel Herrera, que la relación con las bases es lo importante y descubrir en ese trecho a los mejores cuadros y comprometer a los grupos a que se aliaran y no “negociaran” como lo venía haciendo. Hacer que los oaxaqueños trabajen en equipo es tarea seria, sobre todo,  cuando sabemos, cómo lo saben todos, que son tantas las intrigas palaciegas los pequeños intereses de grupitos, las vendettas políticas y personales, los chismes que todos entiende la razón por la que, en Oaxaca, hasta el quesillo se hace bola.
DEJÓ A UN LADO LA POLÍTICA DE LOS BOLETINES Y DE LOS TRATOS CON LOS MEDIOS Y SUS COMUNICADORES POR MEDIO DEL “CHAYOTE”, sabía que la comunicación es el trato directo y veraz, con seriedad y con libertad, con entendimiento y con claridad, si bien, los viejitos del PRI que aparecen como sus “dirigentes” no reciben a los medios ni a los comunicadores, Fidel Herrera se lanzó con ellos y las puertas abiertas y el trato serio y formal le dieron de inmediato otra visión a un proceso. Pero hay que reconocer que en Oaxaca, por la topografía y sus regiones, por sus condiciones especiales, la política se hace caminando y llegando con los dirigentes y sus bases, no por medio de boletines y menos por medio de boletines llenos de espinas y de pocos contenidos, así que recorrió como si fuera su primera vez importantes zonas, entendió la problemática y las confrontaciones internas y se lanzó a arreglarlas por medio del diálogo y de la relación directa, aprendió a comprometer a sus cuadros más importantes y a sostenerse con dignidad, porque los acuerdos pactados serán y serían respetados, esa fue la clave de la FIDELIDAD, y que bueno para Oaxaca, porque entramos a una etapa que esperamos sea mejor. Así que lo que se espera es que no se vengan a imponer a delfines ni juniors, sino que se respeten a los cuadros de base o se genera otro “BRONCO”…