¡Que conste,...son reflexiones!

  • Sócrates A. Campos Lemus

Recuerdo que cuando el presidente José López Portillo, lloró ante las cámaras, los políticos y mexicanos declarando que:¡Defendería el peso como un perro!, muchos políticos declaraban que era una muestra de humildad y de sensibilidad, que tenía un gran corazón y muchas pendejadas más en ese tono de alcahuetes y lame botas; Javier Garcea Paniagua declaraba que: “Si un presidente llora ante sus conciudadanos, seguramente, ya nos llevó la tiznada…”, palabras más o menos, pero era el sentido de la declaración. Y es cierto, un presidente, se supone, es el hombre mejor informado del país, a menos que ande enamorado o se la viva tequiliando con sus compañeros y compadres, es cierto, hemos visto muchos casos semejantes, lo curioso es que hoy, Felipe Calderón, que muchos aseguran se la pasaba tequiliando con sus cuates o bien en la farra y los negocios, asegura que no consolidó la guerra contra el narcotráfico porque muchos gobernadores y presidentes municipales no le dieron ese chance y porque ellos, seguramente, estaban ligados a las actividades de los narcotraficantes.

         Si un presidente tiene en sus manos y control al Ejército, Marina, Cisen, Gobernación, Policía Federal Preventiva, la información de los grupos de espías de los Estados Unidos, DEA, CIA, Aduanas, Tesoro, al igual que cuenta con la información de bancos, hacienda y otras fuentes, por supuesto que debe tener una visión de cómo están las cosas, y por tanto, tiene la capacidad de operar, detener, investigar y consignar a los que las fuentes le marquen como ligados a los grupos criminales, pero la realidad es que, sus principales operadores en esa famosa guerra contra el narcotráfico, estaban o están ligados a muchos de esos grupos y también a los grupos del espionaje norteamericano, de tal suerte que operaron programas como Rápido y Furioso o Receptor Abierto, para, violando la soberanía nacional, y contrabandeando y violando muchas leyes en el país, contrabandearon miles de armas que fueron repartidas, regaladas o vendidas a los grupos e la delincuencia organizada o grupos paramilitares de policías para que, entre ellos, se mataran, alentando una guerra entre esos grupos, operando a los policías y grupos paramilitares para que se incorporaran a esa matanza que ha dejado en el país más de cien mil asesinados, miles y miles de desaparecidos, miles de encarcelados injustamente, miles de desplazados, millones de pesos perdidos, en zonas desbastadas y hoy controladas por los operadores financieros que compraron propiedades. Ranchos, empresas y casas a precios de remate en ese famosa guerra contra el narcotráfico que se convirtió en una inmensa matanza y dejó una estela de muerte odios y frustraciones en todo el país. También, debemos entender que con ese pretexto se gastaron miles de millones de dólares para comprar armas y equipos de los Estados Unidos, entregar el control de los grupos de mando de la seguridad pública y nacional a los norteamericanos y permitir la operación abierta de los espías y operadores financieros y paramilitares de los gringos que ahora son los que controlan a muchas zonas para las operaciones del narcotráfico, y de ahí, ellos, obtienen recursos financieros para operar libremente en otros países guerras como en el caso de la operación Irán-Contras, donde los agentes de la CIA alentaron y protegieron a muchos policías, criminales y narcotraficantes mexicanos para que ellos pudieran traficar y sembrar drogas en el país para obtener millones de dólares que en parte entregaban a los operadores de la CIA, que operaron la guerra en esos lugares y en el país.

         Así que resulta ridículo que Felipe Calderón, conociendo a sus gentes y operadores, nos venga a declarar que perdió la guerra contra el narcotráfico porque unos gobernadores y unos presidentes municipales lo derrotaron. Así, estaríamos jodidos los mexicanos, si pensamos que un grupito de hampones está en posibilidades de derrotar a un presidente y si esto es así, como él señala, pues lo mejor sería que dejaran el poder y denunciara abiertamente a los que le pusieron piedritas en el camino de sus muchos borrachazos, porque no podemos dejar de ver que muchos de sus compadres están o estaban metidos realmente en la protección de los grupos de narcotraficantes o con el cuento de su cercanía con el presidente, obtenían muchos millones de dólares de los hampones con la esperanza de que un día les hicieran algunos favores…

         Tal parece que Calderón se ha dedicado, además de asistir a los AA a diseñar su “defensa”, cuando no la tiene, la realidad es que tarde o temprano saldrá la verdad y se descubrirá que en vez de servirle al país, se alió con muchos grupos, incluyendo a los hampones, para obtener una enorme fortuna que hoy comparte con sus compadres y ñeros de cantina… y así vemos que en vez de tener mayor independencia, estamos en la mayor DEPENDENCIA con los Estados Unidos, claro, entendiendo que nosotros somos los buenos, y ellos, los vecinos, que nos tienen como el patio trasero donde tiran sus desechos…