¡Que conste,...son reflexiones!

  • Sócrates A. Campos Lemus

“Concédeme. Dios mío, serenidad para aceptar lo que cambiar no puedo, valor para cambiar lo que cambiarse pueda, y sabiduría para discernir la diferencia”
         TAL PARECE QUE LA LLEGADA DEL Papa Francisco a tierras mexicana ha sido pactada   por alta jerarquía católica y por el gobierno de México, encabezado por Enrique Peña Nieto. Sin duda, el Papa, que al parecer no es un ser que se deja mangonear y quiere ver la realidad en la que vive y sufre su grey, tratará de romper el cerco oficial para ver lo que en verdad sucede en un país de más de 52 millones de mexicanos en la pobreza, en donde más de 25 millones están en pobreza extrema, donde existen los hombres más ricos del mundo, donde más de siete millones de jóvenes no pueden estudiar ni trabajar, donde más de 20 millones de mexicanos viven en el comercio informal, hoy, perseguido, criminalizado y reprimido fiscalmente, por los burócratas mexicanos, para que ellos continúen haciendo sus negocios privados con los recursos públicos, donde peor que en la dictadura Argentina, donde los golpistas asesinaron, en diez años, treinta mil argentinos, en este país, se han asesinado más de cien mil mexicanos por la “guerra de Calderón contra el narcotráfico”, donde existen más de veinte mil desaparecidos, miles y miles de encarcelados inocentes, miles de desplazados. En un país que es capaz de SALVAR A BANCOS Y BANQUEROS Y ENDEUDAR, POR AÑOS A SU PUEBLO, Y NO ES CAPAZ DE SALVAR NI ATENDER A SUS NIÑOS Y JÓVENES. Efectivamente, el Papa Francisco, tendrá mucho que ver en el país, si es que le dejan salir del círculo de burócratas, que buscarán retratarse con él para aparentar que son “santos”, cuando el Papa, debería saber que, son de esos “mochos” que todo el día tragan santos y defecan diablos por las noches”.
         El Papa Francisco, tiene la gran oportunidad de ver y visitar la ruta, como señala el Obispo Raúl Vera, de los migrantes y de ver las zonas marginadas, empobrecidas de todas las ciudades, en vez de que vea las cosas bonitas y los restaurantes de lujo y los hoteles de lujo en los que pasan sus días los burócratas y ricos de este país, saqueado y robado por todos ellos.
         EL Obispo Raúl Vera, un obispo comprometido con las causas sociales de los pobres y migrantes de este país, señala, con razón ,que el Papa debe visitar las cárceles, para que vea los grandes negocios que se han convertido ahora que se privatizaron y en las que maneja la autoridad que son chiqueros, mataderos, escuelas criminales y enormes negocios para policías y ladrones. Sería bueno que fuera a los penales y platicara con los presos para que le digan lo que cuesta a sus familias sostenerles ahí aunque sean inocentes o estén presos por robarse un pan, mientras los verdaderos saqueadores, ladrones y asesinos están gozando las mieles de la VERDADERA DELINCUENCIA ORGANIZADA compuesta por políticos, funcionarios, policías, empresarios, banqueros… esa mafia intocable en este país y que seguramente será la que cerque l Papa Francisco para que no vea la realidad y se dedique a sobar y dejar sin “pecados” a los verdaderos pecadores, a los que deberían estar en la cárcel y dejar a gusto a un pueblo que todo sufre por su culpa, porque esta mafia de la VERDADERA DELINCUENCIA ORGANIZADA sigue utilizando los recursos públicos que son de todos para hacer sus enormes y grandes negocios privados y saqueando al país en todos sus recursos para entregarlos a los grupos de las empresas y bancos internacionales que nos siguen saqueando, explotando, asesinando y robando.
         Raúl Vera, es nacido en Acámbaro Guanajuato en 1945, ha sido el obispo más amenazado y el que ha salido vivo de más atentados por su trabajo en favor de los desempleados, desprotegidos, desaparecidos migrantes, menores, indígenas… las amenazas no lo doblegan y se ha granjeado odios con los poderosos y ricos, con los políticos y policías, con los delincuentes tiene como profesión la de ingeniero y es uno de los hijos del movimiento estudiantil de 1968. Ahora, después de estar en Chiapas, se le manda a Coahuila al obispado de Saltillo, donde se ha plantado en contra de los delincuentes, narcotraficantes, explotadores y caciques de la región así que ,si el Papa Francisco, quiere ver la realidad de su grey en México, debería pedir consejo para la ruta a seguir a Raúl Vera, pero, como los intereses son enormes y los intereses del clero están ligados a los poderosos, seguramente le pondrán de lado, en lo oscurito, donde no lo vea ni lo escuche el Papa Francisco, que, suponemos, también, piensa un poco como este valiente obispo mexicano.