Cada día que pasa, los eSports ganan más popularidad en México. Por ello, tras varios debates internos entre los expertos del sector nacional de los videojuegos, se creó el pasado 22 de febrero la denominada Federación Mexicana de eSports (FEMES). Su meta es regular los campeonatos del territorio mientras impulsa el crecimiento de esta industria, y para ello ha preparado un programa para encontrar a los mejores gamers de México y formarlos en la disciplina de los deportes electrónicos.

El talento del país

México es un territorio repleto de personalidades sobresalientes y centros que incentivan sus talentos. En el terreno artístico, cuenta con famosos creativos contemporáneos como Amador Montes, pintor oaxaqueño que presentó la exposición “Nada se termina” en Casa Lamm. El Taller de Artes Plásticas “Rufino Tamayo” es otro ejemplo, pues lleva abierto 45 años. Si se analiza el ámbito deportivo, también se hallan relevantes figuras, como Sergio “Checo” Pérez, el primer mexicano en participar en un torneo de Formula Uno tras treinta años, o Hugo Sánchez, uno de los mejores deportistas de la historia.

Así pues, no resulta extraño que los gamers del país también triunfen, dado que los eSports requieren tanto de creatividad como de buenas habilidades físicas. Un jugador profesional ha de ser determinado, avispado y emocionalmente equilibrado, ya que debe aguantar partidas de varias horas con gran presión y sin perder la concentración. Parte del objetivo de la FEMES es preparar a los diamantes en bruto mexicanos para que sean capaces de igualar a los jugadores internacionales más famosos, y para ello, pretenden trabajar en aspectos como la estabilidad mental y emocional.

De acuerdo con Statista, los eSports generan ganancias de hasta 7.2 millones de dólares en México, y se calcula que hasta el año pasado, había 5.4 millones de jugadores. La mayoría de éstos, sueñan con ganarse la vida como gamers profesionales, pero la FEMES ya ha advertido que contará con varios filtros de alta exigencia para seleccionar a los más capacitados. Los estrictos requisitos de la federación están marcados por los pertenecientes a los equipos de élite, que contratan a un número muy limitado de jugadores.

El tirón de los videojuegos en México

Las altas cifras mencionadas solo son un ejemplo de lo exitosos que son los videojuegos en el país. Títulos como Fornite o Dota 2 tienen una increíble fama, al igual que consolas como Playstation 4 o Nintendo Switch. Esta última, que vio la luz en México a finales del 2017, se vendió un 43% más cara que en los Estados Unidos, y aun así, se compraron 7.23 millones de unidades entre noviembre y diciembre del 2017. Tal es la pasión de algunos gamers, que incluso sin la FEMES han logrado sobresalir internacionalmente. Nomy es uno de ellos, que estuvo jugando en la liga profesional de Overwatch (en el equipo San Francisco Shock) hasta agosto del año pasado.

Alrededor del mundo, se llevan a cabo distintos campeonatos de relevancia, en los cuales los botes pueden llegar a ser de millones de dólares. El interés de los aficionados por estos encuentros es inmenso, y por ello hay apuestas de estos torneos en portales como Betway, donde los eSports comparten lugar con los deportes tradicionales. Por ejemplo, según la plataforma, Vancouver Titans es el favorito para ganar la OWL Etapa 2 con una cuota de 3,00 al día 15 de abril del 2019. Los eventos más importantes, al igual que los equipos, también cuentan con patrocinadores internacionales como Mercedes-Benz, que trabaja con Dota 2.

Con la regulación de la FEMES, se espera que la participación mexicana en los grandes torneos crezca exponencialmente durante el próximo año. Otro de los objetivos de la federación es instruir a los más jóvenes para que tengan la profesión gamer en mente y estén familiarizados con el funcionamiento del sistema. Incluso si no se dedican a ello, las nociones básicas del tema pueden ser útiles para los usuarios, y más teniendo en mente las nuevas capacitaciones que están instaurando las empresas en el país. Las relacionadas con los eSports, ponen a prueba las habilidades de los trabajadores a través de partidas online, las cuales extrapolan después al oficio al que se dedican.