Oaxaca.- La lideresa indígena Eufrosina Cruz Mendoza anunció aquí que en breve decidirá cómo va a caminar este 2016, pero aclaró que de una cosa está segura: “no voy a permitir que los caudillos impongan al que quieran dirija el rumbo de Oaxaca”.

De visita en esta cordillera de acceso a la Sierra Sur, la indígena zapoteca, originaria  de Santa María Quiegolani, soltó enfática: “Eufrosina no quiere que los caudillos sigan decidiendo por mí ni por los hijos ni las hijas de Oaxaca”.

Cruz Mendoza estuvo el pasado fin de semana en El Camarón, agencia del municipio de Nejapa de Madera, región de la Sierra Sur, invitada a la inauguración de la pavimentación con concreto hidráulico de la calle principal, hecha con más de 1 millón de pesos de recursos que consiguió cuando fue legisladora federal mediante gestiones ante los gobiernos federal, estatal y municipal.

 Ahí la recibió el agente municipal Adalberto Isaac Ramírez Velasco, junto con presidentes de los Comisariados Ejidales de la zona y centenares de hombres,  mujeres, niños y niñas, con quienes cortó el listón inaugural de la calle Colombia, que implicó la construcción de 1 mil 80 metros cuadrados de pavimento y 360 metros lineales de guarnición, en beneficio directo de 2 mil 170 personas, e indirecto de 7 mil 359 habitantes.

Por ello, la contadora pública de profesión, recién concluida su gestión como diputada federal por el Partido Acción Nacional (PAN), urgió al cambio desde las comunidades.

“Si no cambiamos lo que nos duele, nadie lo va a hacer por nosotros; si no damos el primer paso, nadie lo va a dar por nosotros”, dijo y admitió que “para eso hay que asumir retos, responsabilidades y consecuencias”.

Rodeada en todo momento de ciudadanía, principalmente mujeres, la contadora Cruz Mendoza recordó el día que salió de su natal Quiegolani:

“Mi corazón se dividió en dos: un pedazo se quedó allá, donde está mi esencia, mi raíz, donde están mis padres, mis hermanos, pero la otra parte salió y sigue conmigo, sigue soñando, luchando para que nadie nos diga que quienes venimos de las comunidades, de la cultura del esfuerzo, no podamos tener otra historia para mejorar las condiciones de nuestras comunidades”.

 Insistió: “Que nadie nos diga que las y los indígenas no tenemos cerebro o somos menos, porque el cerebro no tiene sexo ni color; de nosotros y sólo de nosotros depende cambiar la historia de Oaxaca, pero nadie lo hará si no damos el primer paso”.

Sostuvo que “para gobernar Oaxaca primero hay que caminarlo, vivirlo, llorarlo, sentirlo, pues de lo contrario no pueden decirnos que aman a Oaxaca, aunque hay varios que hasta se disfrazan de nosotros para engañar al pueblo”.

Primera etapa de su visita por esta puerta de entrada a la región de la Sierra Sur, la lideresa indígena se comprometió a seguir apoyando a los habitantes de El Camarón desde la trinchera en que se encuentre.

Luego entre cohetes y música de banda, entregó juguetes a las niñas y los niños con motivo del “Día de Reyes”. Todas y todos agradecieron su apoyo.